Expresamos nuestra solidaridad con el pueblo hondureño que se
encuentra movilizado en reclamo de la restitución de su presidente
electo y reclamamos el respeto a la institucionalidad democrática que
se fue violada impunemente reviviendo viejos mecanismos de terror.
En octubre del año pasado participamos del II Encuentro Hemisférico
Frente a la Militarización realizado en el departamento de Intibucá en
Honduras y desde allí condenamos el militarismo y la violencia que han
sufrido y continúan sufriendo los pueblos del continente y el mundo.
Hoy nos encontramos ante un hecho inaceptable en nuestra región y
llamamos a la comunidad internacional a repudiar el golpe de Estado y
exigir el seguro e incondicional retorno de Zelaya a su país, tal como
lo solicitó la OEA en la resolución emitida en la reunión que se
convocó de emergencia por los acontecimientos ocurridos en Honduras.
Una nueva violación de los derechos humanos es inadmisible en nuestro
continente y responsabilizamos a las Fuerzas Armadas y los sectores de
poder hondureños de cualquier tragedia que pueda suceder en el país a
causa de la destitución antidemocrática del presidente.
Instamos a todas las fuerzas democráticas a pronunciarse y
manifestarse en repudio del golpe de Estado, en solidaridad con el
pueblo de Honduras y por el retorno de Manuel Zelaya como primer
mandatario de su país.