“No se puede poner vino nuevo en odres viejos, ni remiendo nuevo en ropa vieja”, Jesús de Nazaret.
La novedad de Jesús inició otra novedad, la novedad del Reino de Dios y su justicia.
Por esa razón el Evangelio de Marcos cita las palabras de Juan el Bautista y de Jesús en el mismo inicio9 de su ministerio público:” El tiempo se ha cumplido , (Metanoia) arrepentíos porque el Reino de Dios se ha acercado”. Estas palabras me hace recordar a Silvio Rodríguez y a Mario Benedetti, porque ellos me definen, sin quererlo lo que es la El Kairos y la metanoia.
El primer domingo de Enero de 1959, ente otras cosas dije en una predicación en la Iglesia Bautista de Managua: “Hoy, primer domingo de enero de 1959, estoy convencido de que a partir de ahora, comienza una nueva etapa en la historia de Cuba”.
Los ideales, el espíritu romántico, la alegría de vivir, la recuperación de la libertad y la dignidad plena de los cubanos y cubanas se acercó, y “de qué manera, a nuestro pueblo, y la metanoía comenzó a darse a pasos agigantados en todos y todas.
Pero olvidamos una cosa esencial, las advertencias de Martí, y la inquietud del apóstol Pablo: Pero este tesoro está en vasos de Barro”.
25 de abril de 1987, apareció el Centro Memorial Dr. Martin Luther King Jr. para saldar la deuda con el Evangelio y con nuestras iglesias, este sueño compartido, lleno de ideales, sentido de vida, de identidad y proyectos de vida. Pero olvidamos las advertencias de Martí y de Pablo_” El tesoro en vasos de barro”.
¿Qué significa la Cuaresma , con su miércoles de ceniza del calendario litúrgicos de nuestras Iglesias hoy? La tradición ceremonial y ritualista de siempre nos dice:”Tiempo de cuarenta días hasta que llegue la Pascua, por lo tanto, debemos rezar, ayunar, dar limosna y hacer penitencias”.
La Teología de la Liberación y sus Comunidades Eclesiales de Base, reconsideraron la Cuaresma y la explican así y yo hago la puesta al día en el hoy de CubaÑ
Cuarenta días para cambias los corazones en el sentido del profeta Ezequiel: “Yo quitaré de ustedes el corazón de piedra y les daré un corazón de carne y un espíritu nuevo”. Ez. 36.
Cuarenta días para hacer alto en el camino, una pausa y evaluar la identidad y vocación de nuestros proyectos de vida.
Cuarenta días en el espíritu de Jesús, Martí, el Che y Martin Luther King, mediar y reflexionar y tomar en serio las causas y las secuela que se han engendrado en “Aquello” que se acercó en el 1959 y en el 1987 a nuestro pueblo y a nuestra realidad eclesial y ecuménica, especialmente, “El pecado ciudadano contra nuestro pueblo”.
Cuarenta días para tejer hilos de esperanza en el vestido de nuestro Centro y de nuestra sociedad.
Cuarenta días para sentir la mano y las palabras de Jesús y muy unido a él, de Miguel Velázquez, de el Hombre de Baraguá, de Martí, de Mella, Rubén Martínez Villega, de Abel, de Frank, de Lidia y Clodomira, de Bernabé Ordaz, entre otros y otras, tan dignos y dignas como ellos y ellas, y…
Entonces, hacer nuestra Cuaresma y prepararnos para llegar a una auténtica Resurrección personal y social y luchar con la fuerza y autoridad ética, moral y espiritual por que llegue al fín el REFRIGERIO QUE NUESTRO PUEBLO SE MERECE.