El próximo viernes 17 de febrero, en el contexto de la XXI Feria del Libro de La Habana, una feliz coincidencia devolverá a la Casa de las Américas la magia de los juglares, al estilo de aquellos años en que el Árbol de la Vida acunó el nacimiento a la Nueva Trova. Desde las siete de la noche, en la víspera del aniversario 44 del primer concierto de aquel movimiento, protagonizado entonces por Pablo Milanés, Noel Nicola y Silvio Rodríguez, tomarán la Sala Che Guevara tres de los trovadores de la generación que les continuó: Frank Delgado, Gerardo Alfonso y Carlos Varela.
Como preámbulo al concierto, se presentará en el mismo espacio el libro Trovadores de la herejía (Editora Abril), de Bladimir Zamora y Fidel Díaz Castro. Según adelantó este último a La Ventana, es un proyecto que comenzó con la publicación del libro Cualquier flor… de la trova tradicional cubana, una antología de cincuenta canciones de nuestra trova tradicional.
Luego, a propósito de los 35 años del movimiento de la Nueva Trova, se editó el cancionero Una guitarra, un buen amor, con temas de Silvio Rodríguez, Pablo Milanés y Noel Nicola.
Los compiladores han querido continuar “peinando generaciones” y ahora, en Trovadores de la herejía, lograron reunir a cuatro de los más destacados trovadores de la generación de los 80: Santiago Feliú, Frank Delgado, Gerardo Alfonso y Carlos Varela. Según recuerda Fidel Díaz, algún periodista o crítico se refirió a estos músicos como “los Beatles cubanos”. Se les conoce además como “la generación de los topos”.
El libro reúne 160 canciones, cuarenta por autor. Diez temas de cada uno de estos músicos aparecen en el libro cifrados para la guitarra, adelanta el compilador, “pues sabemos que en la calle hay muchos jóvenes que gustan de tocar esas canciones en los parques y en las escuelas”. Además, contiene un prólogo de Vicente Feliú, cuatro entrevistas ―una a cada uno de los músicos― y mucho material fotográfico. “Las fotos son increíbles, creo que sorprenderán a muchos: Chico Buarque en un campismo abrazando a Xiomara Laugart, con todos estos músicos alrededor; Frank tocando la guitarra en Angola, con el fusil al fondo; imágenes de muchos de ellos cantando con grandes de la canción de autor latinoamericana…”, invita.
Por cuestiones de espacio, no podrá subir a la sala todo el público que lo desee. Por esa razón, en las calles que circundan la Casa de las Américas, desde las seis de la tarde se instalarán pantallas, servicios de gastronomía y puntos de venta del libro. Cuando comience la presentación en la Sala Che Guevara, se transmitirá hacia el exterior de la Casa. “Será una fiesta por el aniversario 40 de la fundación del movimiento de la Nueva Trova y el 44 de su primer concierto. Gracias a la magia de la Casa de las Américas, será un gran homenaje”, considera Fidel Díaz.
En cuanto a Trovadores de la herejía, anunció además que se trata de una selección pensada en función de la connotación que tuvieron las canciones en determinados momentos: “Creo que el libro recoge lo esencial de la obra de cada autor. Recorrerlas, en conjunto, es acercarse a sus vidas personales y a la Cuba de los 80 hacia acá. Es un valor que agradecerán sobre todo las nuevas generaciones, que no vivieron esos años; además, abre una nueva posibilidad de reencuentro con sus poéticas, con la figura del trovador como ese sujeto que se lo juega todo con la realidad, que discute, que polemiza, que se piensa a sí mismo y a los demás. Santiago, Frank, Gerardo y Carlos: herejes en sí mismos y sujetos claves de una herejía mayor, que es la Revolución cubana”.