La declaración final de la reunión terminó siendo una declaración de exclusiva responsabilidad del presidente de la conferencia, no de los delegados y explícitamente carece de fuerza jurídica vinculante. Es un documento poco común que parece más una relatoría de la reunión que una Declaración, pues más allá de los juicios personales de su delegado-presidente, se recoge de manera cautelosa las diferentes opiniones de la confrontación política y termina con exhortos de buena voluntad. [Véase la versión No oficial al español que les compartimos en http://alainet.org/active/51690].
Las evaluaciones oficiales y oficiosas de los países desarrollados ponen acento en el avance de tres temas: el mejor clima político de las pláticas, la adhesión de Rusia, Samoa y Montenegro y “una reforma histórica de las normas de contratación pública” (representante Kirk de EUA, sic). Obviamente se trata de un ejercicio de campaña mediática, ampliamente divulgada por la telaraña de sus mass-media, pues su “reforma histórica” del importantísimo tema oficial de las compras gubernamentales o contratación pública, se restringe a la declaración de los mismos 42 miembros originales del acuerdo de abrirse a las empresas extranjeras, pero no lograron sumar ningún socio más a la propuesta abiertamente promovida por las trasnacionales europeas y estadounidenses.
El anzuelo del potencial gran negocio internacional de las compras gubernamentales, en manos de las trasnacionales, no lo mordieron las llamadas nuevas economías emergentes encabezadas por China, no obstante que ésta había presentado su solicitud de adhesión pero a última hora la rechazaron por no abrirse demasiado y permitirles a las trasnacionales “sus miles de empresas de propiedad estatal y de todas sus compras provinciales [que] con esto agregaría $ 4 billones en oportunidades y un estimado de $ 200 mil millones en beneficios. Aunque, ahora hay una oportunidad para llevar a Rusia al redil” (escribió el oficioso experto canadiense y asesor Peter Clark, Dec 16, 2011, en: http://www.ipolitics.ca/2011/12/16/peter-clark-at-the-wto-herding-cats-in-geneva/)
Esas mismas opiniones oficiosas de evaluación de la reunión omiten un doble fracaso, la de su propuesta de limitar el proteccionismo tratando se que se tomara la Decisión de Moratoria en todas las formas de proteccionismo, intentando reducir aún más el derecho de los países en vías de desarrollo de ejercer su espacio político necesario para establecer políticas de desarrollo. Como también romper la naturaleza multilateral de las negociaciones y el principio de nada se acuerda hasta que todo acuerde, mejor conocido como entendimiento único, al proponer se aprobar la liberación del comercio de servicios a partir del acuerdo de un pequeño grupo de países, sin que el resto hubiera aceptado o participara en las negociaciones; estrategia publicitada como negociación plurilateral.
Todas estas derrotas a los movimientos estratégicos que intentaron los países neoliberales, fueron producto de una persiste acción común y plural de resistencia encabezada por el grupo de países “amigos del desarrollo”. Con ese nombre se presentó la agenda positiva de exigirles cumplimiento de mandato y compromisos ya acordados a los países que han boicoteado la Agenda de la Ronda de Desarrollo.
En esa acción de resistencia común generalizada, por primera vez en la OMC aparecieron coordinados los países del ALBA, que desde un inicio hicieron declaraciones públicas de alto contenido crítico a los tradicionales mecanismo de manipulación y exclusión de la dupla de burócratas de la OMC y los líderes de la EU y EUA. Y que terminaron deslindándose de una maniobra de presentar como consenso lo que un puñado de países había preparado como conclusión, con lo cual contribuyeron a abortar la maniobra e impedir se repitiera la imposición de algún texto “consensuado” como ha sucedido en otros foros multilaterales, destacadamente en las COP de Copenhague, Cancún y Durban.
“Esta es la primera vez que el ALBA tiene la capacidad de presentar una posición común, en la que tenemos los denominadores comunes suficientes entre nosotros para presentarnos ante la OMC y defender nuestras posiciones”, “…el propósito fue demostrar que un grupo pequeño de países puede utilizar las reglas de juego de la OMC para defender adecuadamente sus intereses”, declaró el viceministro ecuatoriano de Comercio Exterior, Francisco Rivadeneira. (Dic. 18 OMC busca acercamiento al ALBA. En: http://www.prensa-latina.cu/index.php?option=com_content&task=view&id=460842&Itemid=1)
Algo singular de esta 8ª Reunión Ministerial fue también que la propuesta y la crítica demoledora o la declaración opositora a la agenda neoliberal del bloque anglosajón, no provino únicamente de conocidos gobiernos con discursos progresistas de Latinoamérica, África o Países Menos Adelantados. Inesperada y saludablemente, Olivier De Schutter, experto de la ONU sobre el derecho a la alimentación, acusó el viernes 16 a Pascal Lamy jefe de la OMC, de abogar por un enfoque centrado en el comercio “que ha fracasado espectacularmente”.
De Schutter sentenció: “Al promover este enfoque centrado en el comercio, perdemos el más simple enfoque de ganar-ganar. Si estuviéramos por el apoyo a los pequeños agricultores del mundo en desarrollo, que suelen ser los grupos más pobres, podríamos facilitar que salieran de la pobreza, y permitiríamos la producción local de alimentos para satisfacer las necesidades locales. En este contexto, el comercio sería complementario a la producción local, y no justificaría su abandono. Los pobres urbanos tendrían acceso a alimentos frescos y nutritivos, y la brecha entre el precio al productor y el precio de venta al por menor se reduciría. Sin embargo, esto requiere un espacio de política para limitar la volatilidad de precios a nivel nacional: es este espacio político el que las normas de la OMC están reduciendo.”
“Las políticas actualmente diseñadas por el régimen de comercio internacional no apoyan a estos agricultores a pequeña escala. En su lugar, les imponemos la de perder-perder. Ellos no se benefician de las oportunidades que el acceso a los mercados internacionales representa para algunos. Pero son ellos los que son víctimas de la presión sobre los recursos de la tierra, el agua y de los que dependen, para que cada vez tengan que competir con el sector agro-exportador”.
“A largo plazo, la red de países pobres importadores de alimentos no se verá favorecida para alimentarse. Ellos se verán favorecidos al ser capaces de alimentarse por sí mismos. Este es el consenso global de posterior a la crisis mundial de precios de alimentos que incluso el G-20 ha reconocido. Es decepcionante que la OMC sigua luchando las batallas del pasado.” [Véase la versión integral del pronunciamiento en el archivo anexo de “La OMC defiende una visión obsoleta de la seguridad alimentaria.” O la versión original en inglés disponible en: http://www.srfood.org/index.php/en/component/content/article/1-latest-news/1834-wto-defending-an-outdated-vision-of-food-security
Por su parte, también “..la Santa Sede ha llamado la atención sobre la urgencia de una reflexión nueva y profunda sobre el significado y los objetivos de la economía y de una revisión con visión de futuro de la arquitectura global financiera y comercial, con el fin de corregir los problemas de funcionamiento y las distorsiones. Esta revisión de normas económicas internacionales debe integrarse en el marco de un nuevo modelo global de desarrollo. En realidad, esto es requerido por el estado de salud ecológica del planeta, y, sobre todo, por la crisis cultural y moral del hombre, y los síntomas son evidentes en todas partes desde hace mucho tiempo… En resumen, la familia humana no ha sido creada para servir al mercado, sino el mercado para servir a la familia humana. Si se respeta este principio, aunque los tiempos son difíciles, el miedo le dará paso a la esperanza.” [Declaración del Arzobispo Silvano M. Tomasi, Nuncio Apostólico, Observador Permanente de la Santa Sede ante las Naciones Unidas y Otras Organizaciones Internacionales en Ginebra. [Énfasis añadido por A.V. véase la versión completa al español que les compartimos, y la original en inglés disponible en: http://t.co/fDv4TOVw
Se terminó este ensayo de negociación pero continúan las diferencias profundas entre los países y la búsqueda de vías para, por un lado, hacer cumplir lo acordado en materia de desarrollo para la mayoría, como lo establece el mandato de Doha, y por otro lado, continuar eludiendo sus compromisos y tratando de reintroducir temas previamente rechazados como el de inversiones, competencia, cambio climático, seguridad energética y seguridad alimentaria, conforme el capital trasnacional presiona a sus delegados.
Así, abiertamente el representante de Comercio de Estados Unidos, Ron Kirk dio continuidad en la OMC al mismo discurso ensayado en las COP de dividir a los países subdesarrollados (mayores y menores), buscando romper la fuerza de la unidad, el principio de responsabilidades comunes pero diferenciadas y justificar la violación que hacen a sus responsabilidades “Los países en desarrollo no son los mismos, y pretenden contribuir al estancamiento de la discusión sobre muchas de estas cuestiones importantes” (citado por Jenifer M. Fridman. 18 Dic.2011 en: http://www.businessweek.com/news/2011-12-17/wto-meeting-fails-to-make-progress-on-global-trade-negotiations.html)
Los avances de unidad de los Amigos del Desarrollo esta vez fueron evidentes, pero ¿se consolidará para el siguiente encuentro?, ¿avanzarán en unificar esfuerzos en Río+20, otra de las caras de la batalla contra el neoliberalismo y por una agenda global alternativa? Porque como suele decir el astuto director general de la OMC: las negociaciones nunca se acaban.
Ver texto completo y declaración en: http://alainet.org/active/50097
– Alejandro Villamar, economista mexicano, es miembro de Red Mexicana de Acción frente al Libre Comercio (RMALC) y de la Red Mexicana de Afectados por la Minería (REMA).