(…) poner de manera durable y útil todo lo que a pura sangre me ha ido madurando en el alma. Yo no quiero que esta empresa se venga a tierra. (…)
Verá (…) que lleva pensamiento hondo y ya que me la echo a cuestas, que no es poco peso, ha de ser para que ayude a lo que quisiera yo ayudar, que es a llenar nuestras tierras de hombres originales, criados para ser felices en la tierra en que viven, y vivir conforme a ella, sin divorciarse de ella, ni vivir infecundamente en ella, como ciudadanos retóricos, o extranjeros desdeñosos nacidos por castigo en esta otra parte del mundo. El abono se puede traer de otras partes; pero el cultivo se ha de hacer conforme al suelo. A nuestros niños los hemos de criar para niños de su tiempo, y hombres de América. –Si no hubiera tenido a mis ojos esta dignidad, yo no habría entrado en esta empresa.
Martí manifiesta, desde la presentación de La Edad de Oro, la formación y el estímulo de habilidades expresivas y comunicativas, basadas en el respeto y reconocimiento de las potencialidades creativas de los niños:
Los niños saben más de lo que parece y si se les dijera que escribiesen lo que saben, muy buenas cosas que escribirían.
Y más adelante añade: …los niños deben escribir sobre cosas de su edad, para que puedan escribirla bien, porque para escribir bien de una cosa hay que saber de ella mucho. Es un anhelo martiano que los niños de América sean hombres que digan lo que piensan y lo digan bien: hombres elocuentes y sinceros.
¿No es a esto a lo que nos conminan algunos de los Artículos de la Convención sobre los Derechos del Niño?:
Artículo 12
1. Los Estados Partes garantizarán al niño que esté en condiciones de formarse un juicio propio el derecho de expresar su opinión libremente en todos los asuntos que afectan al niño, teniéndose debidamente en cuenta las opiniones del niño, en función de la edad y madurez del niño.
Artículo 13
1. El niño tendrá derecho a la libertad de expresión; ese derecho incluirá la libertad de buscar, recibir y difundir informaciones e ideas de todo tipo, sin consideración de fronteras, ya sea oralmente, por escrito o impresas, en forma artística o por cualquier otro medio elegido por el niño.
Por su parte, la propia Edad de Oro, es un paradigmático ejemplo de lo postulado en el Artículo 17 del citado documento:
Los Estados Partes reconocen la importante función que desempeñan los medios de comunicación y velarán por que el niño tenga acceso a información y material procedentes de diversas fuentes nacionales e internacionales, en especial la información y el material que tengan por finalidad promover su bienestar social, espiritual y moral y su salud física y mental.
La efímera existencia de esta publicación da cuenta de los obstáculos e incomprensiones que, en nuestros países, deben ser sorteados por los que pretenden abrir, a nuestros niños y niñas, caminos para la comunicación y la participación, de manera durable y útil.
Promover espacios de participación en los procesos de comunicación desde la acción protagónica de niños, niñas y adolescentes, potenciar medios que contribuyan al enriquecimiento espiritual de nuestra niñez, han sido los propósitos que animan, desde casi cinco lustros, a los Encuentros El Universo Audiovisual de la Niñez Latinoamericana y, más recientemente, al Foro Internacional La Niñez y su Universo Audiovisual, que tienen lugar durante los Festivales Internacionales del Nuevo Cine Latinoamericano.
Nuevamente convocamos a los que para los niños trabajan y desean que los vean como cosa de su corazón, a compartir experiencias, proyectos y sueños, a esta cita habanera.
Junto a la muestra internacional de filmes para la niñez y la adolescencia Para todas las Edades, que se desarrollará a lo largo del Festival y que cuanta con un jurado infantil que otorga el Premio Garabato, se realizarán talleres impartidos por prestigiosos especialistas, presentaciones de experiencias en el ámbito comunitario, resultados de investigaciones y, sobre todo, se fortalecerá el abrazo fraterno entre aquellos que quieren sentir el apretón de manos de un niño de nuestra América y que los saluden como un viejo amigo.
Para mayor información, contactar a:
Pablo Ramos,
Coordinador
Red UNIAL/ Universo Audiovisual del Niño Latinoamericano
Casa del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano
Calle 2 no. 411, e/ 17 y 19, Vedado, C. P. 10400,
Ciudad de La Habana, Cuba.
Tel. (53 7) 831 9742
E-mail: unial@festival.icaic.cu