Berta Cáceres, miembro de la Resistencia Contra el Golpe de Estado, de la organización indígena y popular COPINH y ex candidata independiente a la vicepresidencia de Honduras, habló sobre la situación actual de su país.
Según Cáceres, en Honduras existe una militarización generalizada y relata que las violaciones a los derechos humanos se manifiestan cada vez más con los asesinatos y las detenciones ilegales hacia el pueblo. Señaló también, que el sector de la diversidad sexual hondureña ha sido el blanco perfecto de policías y militares para abusar de ellos y matarlos.
Berta hizo énfasis especial en la importancia de mantener activos los medios de comunicación alternativos, ya que los medios convencionales que los acompañan en la lucha son victimas de censura por parte del gobierno golpista hondureño.
Afirmó que la decisión de Roberto Micheletti para salir del país durante el proceso electoral, solo demostraba la preocupación de los “golpistas” ante la heroica resistencia de todo el pueblo y reveló además, planes del ejército hondureño para realizar acciones terroristas durante las elecciones del 29 de noviembre y así culpar de todo a los grupos de resistencia popular.
En cuanto al dialogo con el gobierno de facto, dijo que desde el primer momento que Juan Barahona, dirigente del Frente Nacional de Resistencia, se retiró, fue la muestra de que ellos no creerían ni participarían en ningún acuerdo que implicara la renuncia a sus exigencias. “A la asamblea nacional constituyente, popular y democrática no vamos a renunciar jamás” expresó Cáceres.
De igual manera, denunció la manipulación y la estrategia “hipócrita” del gobierno de los Estados Unidos al validar este dialogo llamado Tegucigalpa-San José o Guaymuras, ya que según ella solo representa una clara ventaja para los golpistas y una estrategia para fortalecerlos dentro de este Golpe Militar.
Al referirse a las elecciones convocadas para el 29 de noviembre, expuso que las condiciones que vive el país hacen que este proceso sea ilegitimo, “en el marco de un golpe de estado y una dictadura es imposible realizar elecciones limpias”, fue lo que opinó.
Aseveró que el Tribunal Supremo Electoral de Honduras solo es una “mampara”, que solo son títeres, ya que en realidad la “farsa electoral” está en manos del ejército hondureño. El ejército será el único a cargo de la organización, de los centros de información, de la logística, de las urnas y de las actas electorales según la excandidata a vicepresidenta.
Reveló la campaña de terror que el gobierno lanzó para obligar al pueblo a ir a votar, diciendo que a punta de fusil se quiere imponer al pueblo hondureño a participar en las elecciones. Pero fue clara en la posición firme de toda la Resistencia Popular a boicotear el proceso de votación, no participando en el y realizando movilizaciones masivas por todo el país. Finalizó expresando que elegir un nuevo gobierno no cambiaría la situación, sino que sería la continuidad del proyecto de colonización y dominación de la oligarquía hondureña.
por: Camilo Ernesto Navas Corea