Las Madres, al igual que muchos otros organismos, hemos recibido informaciones sobre presiones realizadas por el Vicepresidente de los Estados Unidos, Dick Cheney, para que el Congreso de ese pas legalice el uso de la tortura.
Sabemos que dicha prctica se lleva a cabo, de hecho, con prisioneros iraques y con personas detenidas en prisiones clandestinas fuera de los Estados Unidos. La base militar de Guantnamo, las crceles de Mazzar el Shariff en Afganistn o la de Abu Ghraib en Irak son vivo testimonio de cmo un crimen de guerra, como es la tortura, es sistemticamente aplicada por funciones yanquis. Asimismo, que hay prisioneros secretamente entregados por la administracin norteamericana a gobiernos extranjeros para que sean torturados.
Rechazamos con toda nuestra fuerza que se legalice y se cometa por parte del gobierno de los Estados Unidos este crimen contra la humanidad, propio de las dictaduras. Ese gobierno est muy cerca de convertirse en el principal ejecutor del terrorismo de Estado en pases bajo su dominacin. El rechazo que la gran mayora de los argentinos sentimos por que el presidente George W. Bush pise nuestro territorio con motivo de la inminente lV Cumbre de las Amricas en Mar del Plata resulta, cada da, mejor fundamentado.