Poco a poco, para nuestro asombro, la sala se va llenando de jóvenes, de esos mismos jóvenes para los cuales, el sábado en la noche es tiempo de “desconectar”, y que junto a miembros de la red de educadores y educadoras populares, asisten a la inauguración de la muestra de carteles “Nuestro antídoto es luchar”, realizada por estudiantes del Instituto de Diseño Gráfico y que llega acá por cortesía del Programa de Comunicación del Centro Memorial Martin Luther King Jr. para constituirse en un espacio más de celebración de sus 25 años de vida .
Entonces ocurre algo muy interesante. Los muchachos y muchachas, vestidos/as de fiesta como corresponde a una noche de sábado, no solo escuchan las palabras inaugurales y visitan la exposición, sino que preguntan, indagan, quieren saber más sobre la presencia militar de los Estados Unidos en América, sobre esa IV Flota que acecha. Comentan carteles, hacen interpretaciones inteligentes, quieren ver números de la revista Caminos que de inmediato ponemos en sus manos. El audio difunde música de Calle 13, Fito Páez, Mercedes Sosa y los muchachos y muchachas, de los cuales algunos fueron expresamente invitados/as, otros/as se dejaron seducir por la divulgación y hasta hay quien confiesa que entró por no tener otra opción mejor, dedican parte de una noche sacralizada por la alienación, al ejercicio del pensar en una realidad que no les es ajena y que les habla con el dolor de una herida abierta, desde la centenaria base de Guantánamo.
Hasta el 21 de abril permanecerá en la Galería de Arte manicaraguense esta muestra de carteles que no solo denuncia las estrategias de una dominación que apunta hacia los sectores más vulnerables del continente, sino que, además, da cuenta de una realidad de resistencia y esperanza. Lo ocurrido en esta noche inaugural ha devenido en todo un reto para la red en Manicaragua que ya está pensando en nuevas ocasiones de aprovechar acá, durante el tiempo que permanezca con nosotros, las posibilidades de la exposición como espacio propicio para el análisis, el debate, el compromiso, la acción y la denuncia a la militarización, sea cual sea el maquillaje que adopte.
por: Esther Ávalos Mesa, integrante de la red de educación popular