No es la primera vez que Cuba es excluida arbitrariamente de la Cumbre de las Américas. La primera vez, en Miami, en 1994, el pretexto fue que la mayor de las Antillas no pertenecía a la Organización de Estados Americanos (OEA). En ese entonces, Fidel Castro catalogó a la Cumbre como “engaño colosal a los pueblos de América Latina, pues se prometió una prosperidad económica que jamás llegó.”
En el año 2001, en la realización de la cita en Québec, Cuba continuaba excluída por los motivos históricos que agenda de la OEA y sus representantes dictaban. Tras la represeión de la policía canadiense a la marcha, los manifestantes contra la cita lograron romper el cordón de seguridad. En ese entonces, Fidel manifestó su apoyo a los manifestantes y calificó el acto de “heróico.”
En 2005 durante la Cumbre de las Américas realizada en Mar del Plata, Argentina, fue la primera vez en la historia de esta Cumbre que se logró la derrota del ALCA. En paralelo se ralizó la III Cumbre de los Pueblos, en la cual Chávez pronunció la famosa frase: ALCA, al carajo”.
En Puerto España, capital de Trinidad y Tobago, participaron los 34 jefes de estado y gobierno excepto Cuba (nuevamente excluida).
En el 2012, en Cartagena de Indias, a pesar de haberse consolidado la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) como alternativa a la OEA, a Cuba se le negó la participación por parte de Colombia alegando cuestiones brucráticas para encubrir su intención de evitar un conflicto diplomático con Estados Unidos. Rafael Correa, entonces mandatario de Ecuador y Daniel Ortega, de Nicaragüa, dicidieron que sus países no asistirían a un evento marcado por el rechazo internacional e injustificado de países dominante a Cuba.
Fue en 2015 la primera vez en la historia de la Cumbre de las Américas, en Panamá, luego de varias presiones por las fuerzas de izquierda, Cuba fue invitada formalmente a participar en el evento y se establecieron conversaciones entre Raúl Castro y Barac Obama.
Una vez más, no solo es exluída Cuba, sino Venezuela y Nicaragua. La IX Cumbre de las Américas a realizarse en Los Ángeles, EE.UU, será un desastre y un “paripé”. Paralelamente se desarrollará la Cumbre de Los Pueblos, una verdadera cumbre sobre democracia.