El Centro Memorial Dr. Martin Luther King, Jr., organización de inspiración cristiana, miembro del Consejo de Iglesias de Cuba, que junto al movimiento ecuménico cubano e internacional ha dedicado esfuerzos y oraciones a favor del proceso de paz en Colombia, manifiesta su profunda preocupación por el arresto de Jesús Santrich, uno de los arquitectos del Acuerdo de Paz de la Habana alcanzado entre las FARC-EP y el gobierno colombiano.
Santrich ha sido acusado de conspiración de narcóticos por el fiscal Néstor Humberto Martínez a partir de acusación formal del gran jurado de la Corte del distrito Sur de Nueva York. El Presidente Santos ha declarado que lo extraditará a EEUU si existen pruebas irrefutables de delitos cometidos después de la firma de los acuerdos.
Esta situación representa otro golpe que atenta contra el proceso de implementación de los acuerdos hasta este momento, un proceso al que han dedicado múltiples esfuerzos organizaciones y actores de Colombia y de muchos lugares del mundo y que atraviesa graves problemas e incumplimientos en su implementación por parte del Estado colombiano.
Santrich, quien fue delegado de paz en la mesa de negociaciones en La Habana, y es miembro actual de la dirección nacional de la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común, uno de los cinco representantes a la Cámara de ese partido político, en una de las curules otorgadas a ellos en virtud del acuerdo de paz, recientemente inició una huelga de hambre en protesta. Siempre fue crítico frente a cómo el régimen colombiano ha actuado frente a los acuerdos de paz.
Todas las personas de buena voluntad comprometidas con la paz de Colombia, interpretan los sentidos de esta acción en la que el gobierno de Colombia y EEUU una vez más actúan en alianza con protagonismo de la DEA cuyo papel es muy claro en la historia del continente y en la coyuntura regional actual. Es importante señalar las declaraciones de la Presidenta de la Jurisdicción especial de Paz quien afirma que conoció del arresto de Santrich por los medios de comunicación señalando no haber sido tenida en cuenta en este procedimiento.
Desde el Centro Martin Luther King, denunciamos todas las acciones y conspiraciones contra el proceso de paz. Estamos frente a una traición a la paz y definitivamente el proceso de su construcción tiene hoy más que nunca un destino incierto. Debemos unir voces diversas de nuestra región y el mundo para exigir que se cuide y respete el espíritu de los acuerdos de la Habana, que se implementen los acuerdos tal como fueron firmados y que el pueblo de Colombia no asista una vez más a golpes de este tipo que amenazan la seguridad y la paz de generaciones de colombianos y colombianas.
