Este 4 de Diciembre de 2017, se marcan 50 años del histórico llamado de Martin Luther King Jr. por una Campaña de los Pobres, misma que marcó una transformación importante en la trayectoria política del emblemático líder Americano.
Durante más de 10 años de lucha por los derechos civiles, las victorias de aquel movimiento no eran pocas, logrando entre otras cosas, la promulgación de la Ley de los Derechos Civiles en 1964 la cual prohibía la segregación racial en espacios públicos y la discriminación racial en aplicaciones para votar, entre otras garantías. Sin embargo, King analizó que la lucha por justicia e igualdad debía enfrentarse con la opresión económica que el país imponía tanto a la población negra como blanca. Esta perspectiva transformó la visión del movimiento, del enfoque en derechos civiles de afro-descendientes hacia un marco sobre los derechos humanos de pobres- negros, blancos, inmigrantes, e indígenas.
Al percatarse de las condiciones de extrema pobreza que existían en las diversas comunidades en todo el país y la fracasada Guerra contra la Pobreza del gobierno Americano, King hace un llamado a todos los movimientos populares a unirse para conformar una Campaña de los Pobres. Tomando consciencia sobre la raíz económica del problema, King también llega a entender cómo el imperialismo Americano se manifestaba en el mundo y así como sus consecuencias internas, llegando a declarar que la guerra en Vietnam no hacía más que enfrentar a los pobres de Estados Unidos contra los pobres en Vietnam. Cuatro meses después de aquel llamado histórico, King fue asesinado dejando inconclusa esa necesaria tarea que buscaba unir las diversas luchas del país para enfrentar el sistema económico y social que los oprimía y dividía. Cincuenta años después de aquel llamado, las condiciones de pobreza que motivaron a King solo han empeorado.
A pesar de las victorias del movimiento de los derechos civiles en la garantía de derechos políticos, las recientes enmiendas a la ley han logrado negarle el derecho a votar a más comunidades pobres y de grupos minoritarios, aún más de lo que se vivía en los días de King. Esto se debe en parte al encarcelamiento masivo de poblaciones negras y latinas que resulta en su exclusión del proceso electoral, ya que personas que han sido condenadas con una delito grave ven su derecho a votar suspendido por años. Actualmente, 66% de la población carcelaria del país es de grupos étnicos no- Anglo, principalmente negra y latina.
Las deportaciones masivas que no eran un tema durante los años de King, son parte de la realidad en este país, llegando al número de 333,000 deportados en el 2015. En cuestión de pobreza, actualmente alrededor de 30.6 millones de niños y niñas viven en condiciones de pobreza o pobreza extrema, siendo 43% de la población infantil del país. La desigualdad económica ha llegado a su punto máximo en años recientes, con el 1% de la población teniendo bajo su posesión el 20.2% de la riqueza del país. Finalmente, mientras que el gobierno federal invirtió solo $183 mil millones en programas sociales para aliviar la pobreza en el 2016, $630 mil millones se destinaron a financiar las guerras interminables que los Estados Unidos propaga.
Es con esa visión, que en lugar de conmemorar y celebrar el legado de Martin Luther King Jr en el 50 aniversario de su asesinato, se pretende levantar la lucha que quedó inconclusa, lanzando este 4 de Diciembre en Washington DC la Campaña Nacional de los Pobres: Un Llamado a un Resurgimiento Moral. Esta vez la campaña es convocada por el Reverendo William J. Barber, creador del famoso e histórico “Moral Mondays Movement” que en Carolina del Norte logró unir a diversas organizaciones tanto religiosas como sociales para hacer frente al gobierno ultraconservador de ese estado. El llamado también lo hace la Reverenda Liz Theoharis de la Red Kairos, que desde hace más de diez años ha buscado unir a diversas luchas en las localidades más marginadas del país como Flint Michigan, Lowndes County, Alabama y Luisiana para revivir la visión de un movimiento popular nacional que King construyó en 1968.
La campaña será dirigida por un comité compuesto por las organizaciones que se han dedicado a organizar este esfuerzo por varios años. Dentro de estas se incluyen: Fight for 15, lucha sindical por un aumento salarial en la industria de comida rápida; Michigan Welfare Rights organización en Detroit que defiende el derecho al agua de comunidades empobrecidas; Vermont Worker Center, movimiento por un seguro médico público y gratuito en aquel estado; la Red Fronteriza por Derechos Humanos, que lucha por los derechos humanos de inmigrantes en la frontera con México, y muchas otras.
Durante cinco meses, Barber y Theoharis hicieron una gira de los Estados Unidos visitando 15 ciudades para promover la campaña, organizando asambleas masivas y entrenamientos con líderes de organizaciones comunitarias, movimientos sociales y diversos líderes religiosos.
Barber y Theoharis fueron recibidos por miles de personas, y un público aún mayor presenció virtualmente los encuentros. En los estados de Alaska, Arizona y Nuevo México Barber también se reunió con naciones indígenas soberanas que continúan su lucha por derechos y dignidad . La gira realizada por ambos líderes mostró el ánimo de lucha de la clase trabajadora Americana, que a partir de la reciente elección de Trump ve la necesidad de un movimiento masivo y la insuficiencia del partido Demócrata como una solución al sufrimiento de los pobres en este país.
La campaña organizará “40 días de resistencia” una jornada de lucha masiva que comenzará el 13 de mayo, Día de las Madres y durará un total de 6 semanas. La original campaña de los pobres también levantó el Día de las Madres, como un día de lucha.
Durante las 6 semanas de lucha miles de personas en una multitud de estados del país se manifestaran pacíficamente llevando a cabo acciones de desobediencia civil, actos que fueron emblemáticos del movimiento de los derechos civiles, inspirados por la lucha liderada por Gandhi en la India. La desobediencia civil consiste en la ocupación ilegal de espacios, a sabiendas de que resultara en arrestos a los cuales los manifestantes se someten habiendo sido debidamente preparados.
Los principales frentes de lucha de la campaña son la pobreza, el racismo, la destrucción del medio ambiente y el militarismo, temas que se consideran centrales en la crisis económica, política, social y ambiental que se vive en Estados Unidos.
Las movilizaciones que se llevarán a cabo a través del país tratarán estos temas y buscarán mostrar la verdadera cara del imperio Americano, desconstruyendo el discurso político que invisibiliza las condiciones sociales y económicas en el país.
El lanzamiento de la campaña se hizo por medio de una conferencia de prensa en Washington DC en la cual se presentaron algunas de las principales organizaciones que dirigen este esfuerzo. Se escucharon testimonios de miembros de algunas de las comunidades que protagonizan la campaña, que incluyeron familias desempleadas del estado de Washington, líderes de la tribu Apache que lucha contra la contaminación ambiental en sus territorios, trabajadores afro-descendientes que luchan por un salario digno junto con la campaña nacional y sindical Lucha por $15, y otros. Al terminar la conferencia de prensa, los grupos ahí reunidos junto con Barber y Theoharis se dirigieron al Capitolio del país para realizar un breve acto que marcó el comienzo oficial de esta campaña histórica.