Ha entrado, en botes, en sinsontes, en mulas, la Agenda Latinoamericana Mundial 2012. Tiene que haber entrado así, porque este año va trayéndonos el Buen Vivir/Buen Convivir: Sumak Kawsay.
Ha entrado a Cuba, y la tenemos en las manos. Debieran ser muchas más. Y con tantos otros artículos. Pero le sucede a la Agenda, como a La Edad de Oro. Cada número pensándose crecer en cantidad, por todos y para el bien de todos. Sin embargo, nunca se detiene la Agenda Latinoamericana.
Se vuelve complejo el tiempo del cubano y la cubana. Resaltan los cambios y en no pocas ocasiones traen la cizaña y el individualismo.
Hasta hay quien dirá que ha aumentado y hay avaros nuevos. Es que esos avaros siempre estuvieron y hoy lanzan su piel bonachona. Como no menos están, los que hoy sufren más. Y errado será afirmar que el cambio propicia de por sí el mal vivir, consiguiente al mal convivir. El cambio en Cuba es tan urgente como jamás lo ha sido. El cambio que tendrá, siempre, ir acompañado de la ética.
Es aquí donde el Sumak Kawsay toca nuestra puerta, con la herencia primigenia del aborigen, ese que tenía a la Tierra tanto como a sí. Miramos oportunamente los sobrevivientes, que por un modo u otro se están haciendo ver más que antes, o al menos, nos los están dejando ver, porque los hermanos quechuas, aymarás, guaraníes, zetzales, mapuches, siempre estuvieron. Antes, lástima grande, los veíamos como muy lejos o muy pocos o muy reliquias.
El Sumak Kawsay es la ética de la Pachamama, si una cosmovisión occidental quisiéramos darle. Es que resulta pleonasmo ética y Pachamama. Aquí, allí adentro en la Agenda Latinoamericana- ecuménica como siempre-, vienen las palabras recogidas a vuelo de pájaro libre, del Buen Vivir.
Es valiente hoy leer e intentar comprender lo que nos pretenden transmitir, los herederos del Sumak Kawsay. En una época donde el decoro fuese quien rigiera más que ley, como aire para respirar. En una época así el Sumak Kawsay, para cubanos y cubanas, no se enfrentaría con problemáticas en su compresión. Queda muy distinto ahora. Ahora que el mezquino no se esconde y quiere sitiar a los que se niegan a perder el decoro.
Oportuna como los Cuadernos Martianos para las escuelas cubanas, así llega la Agenda Latinoamericana del Buen Vivir/Buen Convivir para los educadores y educadoras populares. Sin dudas, las palmas crecerían más rápido y no se desmochara un jardín en Alamar por antojo de un mal vecino. Y el buen vecino no debiera tragar lento y oyendo cómo gritan a él y a sus plantas: “eso trae bichos y mosquitos”.
Trabajará callada, en cada cubano y cubana de hoy, la Agenda con su edición del 2012. Y así lo hace pues: “Las cosas se deben hacer sin llamar al universo para que lo vea a uno pasar”.
por: Frank García Hernández