En la víspera de la VI Asamblea General del Consejo de Iglesias Latinoamericano en La Habana, líderes religiosos comentan sobre este evento:
Joel Ortega Dopico, presidente del CIC: El Consejo de Iglesias de Cuba (CIC) es también anfitrión de este evento y nos sentimos muy honrados que la VI Asamblea del CLAI se celebre en La Habana, Cuba. Creo que es un momento histórico para América Latina, por las experiencias de unidad e integración que en ella se viven. También es un reconocimiento al trabajo ecuménico de las iglesias cubanas a lo largo de muchos años, que han estado integradas a América Latina y a todo el movimiento ecuménico de alcance mundial.
Para nosotros como cubanos es una oportunidad de demostrar también cómo trabaja la iglesia en nuestro país, en la búsqueda de la paz, la reconciliación y de caminos de transformación para Cuba y América Latina. Va a ser momento también de dar gracias a Dios por los logros que, a partir de la unidad y del trabajo conjunto, hemos tenido como iglesias.
Hay un punto muy importante que es la participación, lograr que todos realmente participen. Nuestro Consejo de Iglesias reconoce la diversidad de la que somos parte, pero en medio de esa diversidad hay objetivos comunes que nos trascienden, que son objetivos de amor, de esperanza, de paz.
El lema de nuestra institución dice Unidos para servir, y ahora lo unimos a este lema de la Asamblea y diremos: Unidos para servir afirmando un ecumenismo de gestos concretos. Cada día debemos construir estos gestos, de acuerdo al momento en que vivamos, a los desafíos que tengamos. Cuando hablamos de ecumenismo no solamente hablamos de lo que se hace desde las iglesias sino todo lo que se hace en función del bien social. El CIC trabaja en función de lo que pensamos que es un mandato de Dios, de favorecer a los más necesitados y para eso nos esforzamos.
Hay dos momentos alrededor de esta cita que me gustaría resaltar. Uno es el un taller con cincuenta jóvenes que van a estar unidos en un seminario de prácticas exitosas de una cultura de paz. El otro es la Consulta Continental sobre las Iglesias y los Derechos Sexuales y Reproductivos, que contará con la presencia de la directora Mundial del Fondo de Población de las Naciones Unidas. Creo que estos son gestos bien concretos que abordan temas de importancia vital en la sociedad que vivimos.
María Yi Reyna, presidenta de la Mesa cubana del CLAI: Nos gustaría aclarar qué son las Mesas Nacionales. El CLAI ha desarrollado en los últimos años esta modalidad en cada uno los países a fin de facilitar el diálogo con las iglesias miembros de esta institución. Estas Mesas Nacionales no constituyen en sí una organización sino que son un instrumento para facilitar el trabajo y el diálogo. En nuestro país hay trece iglesias miembros de esta organización latinoamericana, así como cuatro centros y un movimiento ecuménico.
Durante este último tiempo hemos tenido varios encuentros para facilitar el desarrollo de esta Asamblea; ha sido un proceso que se ha interrumpido para tomar decisiones importantes, hemos tenido que aplazar este evento por la congelación de los fondos en un banco norteamericano, pero ha primado la decisión de celebrar este encuentro en nuestro país y a consecuencia de esto, hemos tenido un tiempo de mayor unidad de oración y acción entre todas las iglesias que hemos estado acompañando el proceso. Esta Asamblea es para nosotros una gran celebración, una gran fiesta. Vamos a mostrar nuestra realidad, vamos a convivir juntos y conocernos mejor.
Nilton Giese, Secretario General del Consejo Latinoamericano de Iglesias: ¿Por qué Cuba? ¿Por qué las iglesias quieren venir a Cuba? En esta VI Asamblea las iglesias quieren conocer, acercarse, hermanarse con las iglesias aquí, hacer lazos de solidaridad con las iglesias y el pueblo cubanos. Un elemento importante es que queremos conocer la realidad cubana. No queremos estar una semana en un hotel, sino salir a ver la realidad en Cuba, compartir logros y dificultades y aprender unos de los otros, en un espíritu de diálogo. En 35 años de historia del CLAI es la primera vez que hay un encuentro de veinte países, que vienen a encontrarse con las iglesias de Cuba.
Muchas iglesias en América Latina pasaron los últimos tres meses haciendo una gran campaña presentando las consecuencias del último huracán que pasó aquí, que fue Sandy, en octubre del año pasado. Entonces las iglesias quieren manifestar su apoyo al proyecto de solidaridad que el Consejo de Iglesias de Cuba está desarrollando en este sentido. En esta comunión de iglesias que somos lo queremos es ayudar mejor, aprender de ustedes y compartir nuestras experiencias. Traemos ofrendas para apoyar este proyecto de reconstrucción que el CIC tiene en Santiago y Holguín, y también para otros proyectos de salud, formación y capacitación de líderes, entre otros.
Creemos que cuando las iglesias se unen, cuando reconocen en cada una de ellas una expresión del amor de Dios, también podemos impactar mejor en la sociedad en que vivimos. Por eso hablamos de un ecumenismo de gestos concretos, de solidaridad.