Versiones dicen que fue bajado por hombres quienes lo amarraron, se lo llevaron y fue encontrado el jueves 2 de julio en horas de la mañana, sepultado cerca del acueducto de la vereda Piedras, totalmente descuartizado.
El compañero José Antonio era vocero de las marchas cocaleras realizadas por los campesinos en varias oportunidades y en las que firmaron acuerdos con el gobierno nacional y departamental, acuerdos que nunca se han cumplido.
Llegó al CNA con el ánimo de unir los esfuerzos en la lucha, resistencia y permanencia en los territorios.
También hacía parte de la comisión política de la MINGA SOCIAL Y POPULAR DE RESISTENCIA, en la que había participado activamente en las reuniones programadas, así mismo en reuniones con delegados del gobierno nacional.
Deja el compañero su esposa y 3 niños que lloran su pérdida y claman justicia, así como un proceso campesino de lucha y resistencia y un legado de entrega a la defensa del campesinado, y el mensaje de unidad, solidaridad y resistencia.
Estos hechos se presentan en el marco de la seguridad democrática del presidente Alvaro Uribe Vélez, en una zona de control militar y paramilitar, solo a escasos 10 minutos hay retén del Ejército de Colombia y presencia de policía en los cascos urbanos.
Confirmamos una vez más que al gobierno nacional no le importa resolver los problemas del campesinado colombiano y a todos aquellos que nos atrevemos a exigir se nos tildan de terroristas, judicializan, desaparecen o asesinan.
Hacemos un llamado a las organizaciones hermanas nacionales e internacionales para exigir al estado colombiano el esclarecimiento de los hechos, y castigo a los responsables, para que su crimen no quede en la impunidad que hoy reina en Colombia.
Enviamos un abrazo solidario y fraterno a la familia de José Antonio, al igual que a los compañeros y compañeras de ASOCBAC, manifestándoles el compromiso de continuar con la lucha, la resistencia y siguiendo el ejemplo de gallardía de nuestro compañero y líder.
Coordinador Nacional Agrario de Colombia CNA