Gabriela Montaño, Presidenta de la Cámara de Diputados de Bolivia, compartió ideas en la tarde de ayer con los participantes del 12º Taller Internacional Paradigmas Emancipatorios. Durante más de una hora, la lucidez de sus palabras –atendidas, entendidas y compartidas por los presentes- dejaron un mensaje de esperanza y unidad a los movimientos de izquierda del continente.
La también luchadora feminista se refirió a la situación del contexto latinoamericano actual, los retos futuros, los retrocesos en los últimos años de la izquierda y el avance de la derecha en el continente, así como los elementos de esa derecha conservadora que generan cotidianamente mayores conflictos a los procesos populares y las revoluciones.
En su opinión, “la farandulización de la política” es un término que describe lo que hace la derecha porque conciben el hecho político en una farándula vinculada al entretenimiento, y la política se vacía cuando se convierte en instrumento y fin para la novedad y el entretenimiento.
Gabriela contó la experiencia del gobierno boliviano y sus dificultades, así como las características de la lucha en el poder. “Nosotros hemos aprendido que la economía tiene que ser una parte central de gobernar, si Bolivia no puede ser sometida a mayor desparpajo de la derecha es porque ha habido un elemento de manejo económico que ha logrado redistribuir las ganancias entre la gente, que ha logrado transformar la vida de las personas. Pero tampoco podemos dejar a la gente sola, y desideologizada.”
Explicó además la estrategia de desarrollo nacional hasta 2025 y las vías a través de las cuales piensan lograr la reelección del presidente Evo Morales: “creemos que todavía Evo no puede dejarnos solos, no es cierto que es porque no haya liderazgos potables y potentes, no es cierto que no haya una construcción de organizaciones, pero así como Cuba tuvo derecho a construir una democracia donde su líder pudo estar a la cabeza de su transformación durante 50 años, Bolivia va a tener a Evo por lo menos durante 10 años más. Lo necesitamos y queremos.”
En sentido general, la intervención de la Presidenta de la Cámara de Diputados de Bolivia fue un llamado a la unidad y la confianza en la lucha de los pueblos y sobre todo a tratar de entender los retos actuales para poder superarlos.
“Tenemos que comprender que esos valores (los de la derecha) están situados en la mente, en el alma y en el cuerpo de la gente. Ellos ya no compra ideas que estén enfrascados en una botella que no tengan el rótulo de farándula y si no entendemos esto seguimos intentando responder con herramientas viejas, no útiles que dimensionan poco la realidad.
“Otro error sería que nos quiten las banderas de la izquierda. Hoy ellos son los defensores de la democracia cuando nosotros hemos puesto con nuestra vida, nuestra sangre, nuestra caminata, nuestras luchas la democracia en el continente. Ahora ellos son los abanderados de la democracia, una democracia que solo puede ser del formato que ellos pretenden.
“Para mí una de las principales necesidades que tenemos como izquierda es comprender que si a Venezuela hoy la golpean, la tratan de destruir nos están destruyendo a nosotros en Bolivia, en Ecuador, en Cuba, en Nicaragua, nos están destruyendo a todos…y nos tratan de hacer competir para ver quien es mejor que otro. Y lastimosamente dentro de la izquierda hay quienes creemos esos discursos, los apalancamos, rompemos solidaridades y no entendemos que si hoy no nos comprometemos hasta el tuétano con Venezuela estamos poniendo en riesgo y botando en la basura todo lo que hemos construido en Bolivia, en Ecuador, en Cuba.”
Por último, dijo “ hoy no tenemos una mesa llena de presidentes progresistas, pero tenemos pueblos que saben que detrás de la unidad, de la construcción de organizaciones hay victorias, esas victorias las tienen en su cuerpo y en su espíritu; además, tienen la experiencia de haber gobernado 10, 12 años. Una experiencia que en las izquierdas del continente no existía hace años, hace 20 años nunca habíamos gobernando en algunos países, la izquierda no había podido tomar el poder y transformar la realidad desde ahí, siempre habíamos arrancado las conquistas desde abajo. Hoy sabemos que es posible la victoria, hoy sabemos que es posible gobernar, lo único que requerimos es unidad y organización.”
Acabo de escuchar las palabras de Gabriela, me parecen geniales, ese llamado a la unidad de la region , a no estar aislados, a reconocer que la derecha esta «robando » nuestro discurso, nuestros símbolos y los estan haciendo suyos es un llamado a la construcción de otra hegemonía, a favor de l@s que cuando hablamos de democracia y participación lo hacemos convencid@s que es con y junto a l@s desposeid@s y a quienes han dejado su vida en el empeño.