Hace un año, el 28 de junio de 2009, la oligarquía hondureña junto al ejército, de la mano del imperialismo y bendecidos por la jerarquía de la Iglesia Católica, secuestró y expulsó del país al Presidente constitucional, Manuel Zelaya Rosales, para imponer un régimen de represión en beneficio de los negocios de los grandes empresarios locales y las empresas multinacionales, en detrimento de los derechos colectivos.
Ese régimen golpista encabezado por el Sr. Micheletti avanzó sobre los derechos sociales de los trabajadores y trabajadoras e implantó un régimen que se cobró la vida de decenas de personas. Al mismo tiempo, desde el Estado se destinaron millones de dólares para incrementar los negocios privados y aumentar sustancialmente el presupuesto militar, postergando una vez más los derechos económicos, sociales y culturales, y generando una deuda ilegítima que no fue usada en beneficio del pueblo, sino todo lo contrario. Denunciamos esa acumulación de deuda y sostenemos el derecho que le asiste al pueblo hondureño a negarse a honrar su pago, porque carece de toda legitimidad y es nula de nulidad absoluta por haber sido contraída por un régimen dictatorial.
Manifestamos nuestro rechazo y no-reconocimiento del gobierno del Sr. Porfirio Lobo, surgido de elecciones ilegítimas y continuador de la represión contra el pueblo hondureño. Durante lo que va del 2010 hubo más de 100 asesinatos de miembros de la resistencia, como así también amenazas, intimidaciones, arrestos injustificados y torturas que no pueden quedar impunes. De igual modo, denunciamos que las deudas financieras contraídas por el actual gobierno, con la complicidad de las Instituciones Financieras Internacionales y otros prestamistas internacionales y nacionales, carecen de legitimidad alguna por ser una continuidad del régimen dictatorial.
Hacemos un llamado a los pueblos y gobiernos de América Latina y el Caribe en particular, y del resto del mundo, a seguir sosteniendo el no-reconocimiento del actual gobierno ilegítimo de Honduras y a realizar las gestiones a su alcance ante organismos internacionales y nacionales para garantizar la plena vigencia de los derechos humanos y el fin de la represión en el país. Y a reconocer al Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP) como un genuino representante de los intereses del pueblo hondureño.
Este 28 de junio nos convocamos frente a los consulados y embajadas de Honduras en nuestros países para plantear nuestro repudio al golpe de Estado y al actual gobierno ilegítimo y manifestar nuestra activa solidaridad con la resistencia hondureña y el apoyo a la realización de la Asamblea Nacional Constituyente.
¡Viva la resistencia hondureña!
¡Viva la Asamblea Constituyente y la refundación de Honduras!
JUBILEO SUR/AMERICAS
23 de junio de 2010