Un servicio informativo de la influyente empresa O Globo coment este mircoles que ministros y asesores de Lula lo han aconsejado de hacer un pronunciamiento sobre la situacin global de la nacin en el cual muestre que pese a los problemas, la economa nacional va bien y el gobierno “sigue trabajando”.
De acuerdo con ese medio el discurso del mandatario ya fue grabado y pronostic que en l, el presidente no pedir disculpas.
El pasado martes en Sao Paulo, manifestantes protestaron contra la corrupcin poltica. La demostracin fue organizada por cuatro centrales sindicales de oposicin al gobierno del presidente Lula y por la Confederacin de las Industrias del Estado de Sao Paulo y la seccin paulista de la Orden de Abogados de Brasil.
Participaron representantes de los dos principales partidos polticos de oposicin, el Social Demcrata Brasileo (PSDB) y el Frente Liberal, y de las agrupaciones de izquierda que rompieron con Lula: los partidos Verde, Popular Socialista y Democrtico Laborista.
La protesta fue bautizada por sus organizadores como Grito del Silencio. Un panfleto distribuido seal que en Brasil ocurre “la ms grande crisis poltica de su historia”. Agreg que “cada da surgen denuncias de graves casos de corrupcin en el gobierno federal y en el Congreso Nacional”.
Denuncias sobre la actual crisis en Brasil sealan que esta obedece a un plan opositor para evitar que Lula sea reelegido presidente en los comicios de 2006.
En el contexto de las turbulencias que enfrenta el gobierno, el Movimiento de los Trabajadores Rurales sin Tierra (MST), de cuatro millones de campesinos, dijo que tratar de interferir la parada militar de hoy con el fin de protestar por los retrasos en el desarrollo de una reforma agraria prometida por Lula.
Es una tradicin que el MST participe cada siete de septiembre en el denominado Grito de los Excluidos, el cual desde 1995 lleva a cabo actos contrarios a las conmemoraciones oficiales brasileas por el Da de la Independencia. Jos Dirceu, ex ministro jefe del gabinete civil brasileo, quien se vio obligado a renunciar bajo las presiones de la oposicin, dijo que fue vctima de un “fusilamiento poltico” . Acus a las comisiones de investigacin de actos de corrupcin de estimular “denuncias irresponsables para crear un ambiente de horror, escenario favorable a las ambiciones polticas de algunos”.
Dijo que no ha sido juzgado por “posibles errores o supuestos delitos, sino por lo que represento en la historia de la izquierda, del PT (Partido de los Trabajadores, gubernamental) y del gobierno de Lula”.