El homenaje fue realizado en la capitalina iglesia bautista Ebenezer, que pertenece a la fraternidad de Iglesias Bautistas de Cuba, por los representantes de distintas denominaciones religiosas representadas en el país.
En la celebración se resaltó la excepcional vida de Mandela y los oradores de las distintas religiones tuvieron en común el respeto y el agradecimiento por una vida de lucha contra la desigualdad y el racismo.
En su intervención, el embajador de Su-dáfrica en Cuba, Naphtal Manana, afirmó que no se perdió a Mandela pues su espíri-tu nos acompaña. El embajador hizo un lla—mado a continuar promoviendo sus ideas de paz, democracia y progreso.
Por su parte, el reverendo Raúl Suárez, Director del Centro Memorial Dr. Martin Luther King Jr., aclaró que no se rinde cul-to a su muerte, sino a la vida de Man-dela, una figura que vale la pena recordar.
De esta misma manera, el reverendo Joel Ortega Dopico, presidente del Consejo de Iglesias de Cuba, explicó que hombres como Mandela se convierten en luz, que debe seguir brillando en medio de nosotros y en medio de África.
Mientras, el imán Yahya Pedro Lazo, Presidente de la Iglesia Islámica de Cuba, aseguró que debemos recordar a Mandela y dar las gracias por su ejemplo de rectitud, amor y por toda su vida.