Este 4 de noviembre América Latina es noticia. Una acción continental desde abajo tomará calles, plazas, altoparlantes y medios de comunicación para ponerle un pare al neoliberalismo y a los planes de la derecha en la región que irrespetan y quieren derrotar la voluntad popular.
“Solo con la integración nosotros podemos construir alternativas en América Latina”, aseguró Llanisca Lugo, integrante del equipo del Centro Martin Luther King Jr., una de las organizaciones cubanas convocantes a esta jornada.
“Nos sentimos parte de lo que está ocurriendo en el continente”, dijo en la conferencia de prensa previa a la jornada movilizativa. No se limita a un sentimiento de solidaridad con pueblos hermanos, también es un proceso de aprendizajes desde Cuba hacia el continente y desde él hacia la isla. “Es en la calle donde se dan las luchas. Solo en diálogo entre todos encontraremos caminos.”
Los temas que inspiran esta jornada continental forman parte de las agendas de lucha cotidiana de los movimientos sociales latinoamericanos. Hay ejes comunes que atraviesan la realidad más allá de sus expresiones locales: el poder del capital trasnacional que se apropia de los recursos territoriales, que enriquece a unos pocos y empobrece a multitudes; el menosprecio a las mujeres y sus reivindicaciones, al campesinado y su derecho a cultivar la tierra de manera soberana, por solo citar algunas de las razones que animan a decir basta.
María del Carmen Barroso (ANAP), de la dirección nacional de la ANAP reconoce que para campesinos y campesinas de Cuba la soberanía, tema central de la movilización en la isla, tiene una arista especial, porque conecta con la soberanía alimentaria, que es un elemento sustantivo en la proyección que se ha realizado como parte del modelo de desarrollo económico y social de cara a 2030.
La Plaza Ignacio Agramonte, de la Universidad de La Habana se unirá este viernes 4 a las 4 de la tarde con la energía rebelde que mueve al continente. Representantes de los sindicatos, estudiantes, mujeres y otros presentantes de las organizaciones sociales cubanas llegarán aquí para alzar sus voces porque:
-la unidad latinoamericana es un proyecto que comenzaron nuestros próceres de la independencia y es nuestra responsabilidad defenderla;
-porque podemos reconstruir el consenso logrado de que es posible tener países soberanos y construir desde ellos la integración,
-porque Cuba es nuestra y la soñamos y defendemos cada día desde los sentidos múltiples que cada quien encuentra para amanecer y hacer las cosas por bien de todos y todas.
Nos vemos en la Universidad de La Habana y en Guantánamo, donde hay un pedacito de la isla que todavía no es totalmente nuestro, por él también nos movilizamos.