Una representación de los organizadores del IV Foro Social América (FSA) a nivel nacional y hemisférico, intercambiaron en la Presidencia paraguaya con Fernando Lugo, este lunes 19 de julio. Como parte de la agenda de la reunión se repasaron momentos del programa general, previsto del 11 al 15 de agosto venideros.
Lugo se interesó por los preparativos de este IV Foro, que inundará la ciudad de Asunción, un desafío en términos logísticos, pero al mismo tiempo una posibilidad para discutir problemáticas comunes del continente, conocer otras experiencias de transformación social y enlazar aún más, a los movimientos locales y regionales.
En el encuentro matutino el Presidente indagó por las delegaciones internacionales y nacionales confirmadas, algunas de una amplia tradición de lucha social y de presencia en estos espacios. Hasta la fecha se han inscrito unas 550 organizaciones, sobre todo del Cono Sur.
El FSA tiene un carácter descentralizado, es construido de manera colectiva. Las organizaciones inscritas proponen, coordinan y autogestionan sus propias actividades para esos días. Entre los temas que más interés despiertan están las múltiples expresiones de la crisis sistémica actual y las alternativas ante ella que se ensayan en el continente; las luchas por los territorios, por los derechos laborales, contra la violencia y la militarización y los desafíos políticos y organizativos de los movimientos sociales en América Latina y el Caribe, entre otros.
A Lugo les resultan familiares las dinámicas de este tipo de foros, porque ha estado ligado a algunas de sus ediciones, incluso desde antes de llegar a la primera magistratura de su país. En el 2006 asistió al II FSA en Caracas, Venezuela. Ya al frente del gobierno guaraní llegó en enero de 2009 a Belem do Pará, en Brasil, sede del Foro Social Mundial (FSM). Respondía a una invitación de los movimientos sociales, a varios presidentes latinoamericanos. Junto a él asistieron Evo Morales de Bolivia, Rafael Correa, de Ecuador y Hugo Chávez, de Venezuela.
En aquel momento Lugo reconoció que una genuina integración latinoamericana “tiene que venir desde abajo, de ahí la urgencia de democratizar más nuestras sociedades para hacerlas escenarios de participación popular”. Además llamó “a impacientarse para derribar tantos muros y límites y construir con mayor velocidad humana y cristiana el mundo mejor que nos merecemos y que ya está siendo real”. Ahora es su nación la anfitriona de un FSA, por lo que se acrecienta su compromiso con este ámbito de articulación hemisférica.
A su vez, entre los debates de este encuentro continental se incluirán temáticas sobre Paraguay, su historia y coyuntura actual. Justo su jornada de cierre coincide con la conmemoración del segundo aniversario del gobierno de Fernando Lugo. El Foro promete ser una expresión de la solidaridad con el proceso y pueblo paraguayos.